HISTORIA DE LA ACTIVIDAD MOTORÍSTICA AERONAÚTICA DE ALFA ROMEO
(publicada en Archivo Histórico Alfa Romeo Volumen II, 1998)
Capítulo III
ALFA EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
- EL NACIMIENTO DE LA FÁBRICA DE SAN MARTINOEn 1938 se registró un repunte de los pedidos por parte de Regia Aeronáutica. Mientras tanto proseguía la obra de perfeccionamiento del motor de avión A.135 estelar de 18 cilindros con una potencia de 1600 HP. Los eventos bélicos impidieron un desarrollo de este motor del que solo se realizan 150 ejemplares.
El magnifico rendimiento de los motores A.126, demostrado en ocasión de la empresa realizada por los "Sorci Verdi" en la carrera Istres-Damasco-Paris, efectuada en agosto de 1937, hace resaltar aun más la producción de motores Alfa Romeo.
En este mismo año, la Aeronáutica Militar propone al I.R.I. la construcción de una gran fábrica aeronáutica para la producción de motores y aviones en el Sur de Italia.
En el laboratorio metalúrgico de Portello se realiza una aleación ligera de excelente calidad llamada Duralfa. Es empleada en la producción de hélices (Duralfa 2), pistones (Duralfa 3), culatas (Duralfa 4), en los soportes de los motores estelares y para las bielas de los motores en línea (Duralfa 1).
El 1 de abril de 1939, con la presencia del Jefe del Gobierno, se coloca la primera piedra de la fábrica que fue erigida en un área comprendida entre Pomigliano d'Arco y Acerra, área que permitía utilizar la red ferroviaria del estado y las secundarias. Dentro del campo de vuelo, fue ocupada una superficie de unas 300 hectáreas.
Es constituida una oficina con el objetivo de mantener los contactos con las autoridades y de seguir las directivas del Comité para la construcción de la fábrica. A cargo de esta oficina fue nombrado el ingeniero Cuocolo.
Fueron creados tres centros principales: Producción de Motores, Producción de Aviones y Centro de Aleaciones Ligeras.
La producción de motores de aviación, que continuaba constituyéndose como La principal actividad de la Empresa, ascendía, en el 39, a 1.243 unidades. Una fuerte mejora, respecto a 1938, se registró en la producción de recambios.
En torno al 10% de los motores de aviación era exportado.
Las órdenes de pedidos aseguraban el trabajo de los distintos departamentos hasta septiembre de 1940. Además estaba en curso de aprobación el compromiso para la construcción de motores de aviación con cilindros en línea y refrigerados por agua, para la Regia aeronáutica.
Las previsiones para 1940, ilustradas por Gobbato, en la sesión de finales de año, relacionadas con la nueva planta de Nápoles, que debía producir, en el primer año de actividad, dos tipos de motores en línea con refrigeración por aire y modesta potencia: el Alfa 110 y el Alfa 115, de 4 y 6 cilindros respectivamente. La actividad debía iniciarse con una producción mensual de 60 motores y aumentarse hasta los 130 a finales de 1940, de los cuales 42 unidades-base correspondían a la producción del Alfa 126. Para la planta de Portello se preveía una producción de 120 unidades-base al mes.
Se esperaba poder iniciar pronto la producción del motor de 1500 caballos Alfa 135 y, su licencia, el motor de cilindros en línea refrigerado por agua que fue denominado Alfa 150.
Mientras tanto los motores Alfa continuaban cosechando éxitos. Se efectúa el crucero en Brasil con 9 aparatos S79 realizando una doble travesía del Atlántico Sur; después otros vuelos atlánticos: un hidroavión Cant Z506 del comandante Stoppani y otro Cant Z506 de la aeronáutica civil con el comandante Klinger con motores Alfa.
Estamos en los inicios de 1941. Los trabajos en Pomigliano iban bien, tanto como para hacer esperar que el primer motor pudiera ser probado en marzo.
Se construye una sala de motores de 1800 m2., una nave para las herramientas, un gran almacén general, un gran laboratorio metalúrgico, un complejo de salas de pruebas de motores. A la espalda del aeropuerto, construido en un área d 1.800.000 m2., fueron construidas naves y oficinas. Este complejo disponía de guardería, enfermería y comedor. Se constituye también una empresa agrícola para la producción de legumbres, verdura, y fruta, suficiente para alimentar a las plantas de Pomigliano y de Milán. Había modernos establos con 200 cabezas de bovino, una conejera, granja de cerdos y aves de corral.
El Comité deliberó también la construcción de un grupo de habitaciones para los trabajadores, con un pequeño huerto para cada familia. Se trataba de unos 500 apartamentos que fueron construidos en un área anexa a la planta.
A finales de año, la situación en la planta de San Martino era la siguiente: la producción de motores proseguía regularmente gracias a un pedido de motores Alfa 150; se estaban, además, definiendo los acuerdos para la construcción de grandes aparatos bajo diseño del ingeniero Zappata, que tenia el cargo de consultor técnico. Los primeros encargos estaban previstos para el mes de abril de 1942 dado que el aparato era un bimotor de gran escala que era fabricado por primera vez.
En Milán, el departamento de la elaboración de los motores de aviación se unió con el departamento experimental.
Es homologado, después de las 150 horas de vuelo reglamentarias completadas, el motor Alfa 135, ya homologado en el banco de pruebas desde abril de 1940.
Estamos ahora en 1942 y la planta de San Martino sufre las dificultades de la demora en la provisión de maquinaria y equipos, además de los problemas inherentes relacionados con el comienzo de la producción del motor R.A.1000, de difícil construcción, así como a los frecuentes ataques aéreos.
Pero todo esto no impide que se prevea un incremento de la producción para 1942. Se pensó también producir en Pomigliano los motores en línea y en Milán los estelares.
La Regia aeronáutica, después de la asignación a la Fiat de un nuevo tipo de motor (una derivación del A.R.1000) que debía entrar en producción hacia mitad de año, pide a Alfa aumentar la producción mensual del A.R.1000 a 100 unidades. En previsión de eventuales ataques aéreos, la R.A. sugiere a Alfa producir, en una nueva fabrica a erigir junto a las instalaciones Milán, los 50 motores solicitados de más.
En Pomigliano es también iniciada la producción de la sección de células y la de la sección de aleación ligera; estos edificios eran ya utilizados por el Mando alemán para la reparación de aparatos y motores. Las reparaciones eran efectuadas por el personal alemán, ayudado por numerosos trabajadores de Alfa.
Mientras se estaba preparando todavía, en la C.R.D.A. (Cantieri Riuniti dell'Adriatico – Astilleros Reunidos del Adriático), la construcción del prototipo metálico del aparato Cant Z 1018, nace la posibilidad de producir otro tipo de aparato también metálico, ya definido y que habría podido ser puesto en producción antes del 1018.
Continua...Elvira Ruocco
